miércoles, junio 20, 2007

El viaje continua


Vaya que el sueño duró más de la cuenta. No había tenido de escribir en este espacio cibernético y mucha cosas han pasado desde que se publicó el último post.
Vamos por partes. El Mundial desde una redacción es algo sui géneris. Si hay tiempo para ver lo partidos y de verdad se respira, come, vive, sientes y escribes de futbol. La jornada mudialista iniciaba con la tradicional canción de moda antreara que ponía el diseñador, el cual se convirtió en un himno de batalla.
Cuando aún no terminaba el último, juego a empezar a redactar después de observar la información más destacada. Para mi suerte, me dejaron llevar la información de mi equipo favorito: Brasil. Una vez cerrada la edición, a casita a descansar con alguno de los programas mundialistas de la tele.
Esta vez ya no para ver las jugadas pues a esas alturas del partido, uno ya sabe cómo se generó la jugada, los pasos que dio el delantero para llegar al balón y la cantidad de papeles que aventó el aficionado. Más bien con la intención de reírse con el Güiri-Güiri.
Y pa terminar el día, un jueguito en el Nintendo de la Copa del Mundo jugando con México y viéndolos salir campeones del mundo.
En conclusión, es un mes de locura panbolera. De ahí que se esté en los brazos de Morfeo y se siga viendo pasar un balón de un lugar a otro. He de confesar que me divertí demasiado.
En los meses subsecuentes pasó de todo, estuve en cuatro redacciones diferentes hasta que llegué a la actual. La del periódico de las letritas rojas…. Y no es de nota roja afortunadamente.
También hubo tiempo para terminar mi tesis y titularme; viajar a Guadalajara, Morelia y Acapulco, en lo que significaron mis primeros traslados periodísticos pa escribir de deportes en estos lugares.
Ha sido un crecimiento en lo profesional muy satisfactorio, donde las vivencias periodísticas no se detuvieron mientras seguía en mi mundo entre balones y letras…..


Ya habrá tiempo pa contarles todas las choco aventuras. Mientras, pus vivan a gusto y diviértanse con un blog más divertido como el de mi estimadísimo amigo Gade.

ABOUR, BUR.