lunes, mayo 08, 2006

Dios te bendiga Kika...

Cuando uno disfruta el caer del agua contra nuestro cuerpo en un sencillo baño de la mañana, de lo jugoso de una fresa durante el desayuno, del despertar en tu propia cama para ver la luz de la mañana, de escuchar tu disco favorito de regreso a la casa, del murmullo de la lluvia al precipitarse contre el pasto y muchas situaciones más, es porque estamos concientes de nuestra existencia, efímera y sub realista como nuestro entorno.

Hay veces que nos perdemos tanto en la cotidianidad de lo banal que dejamos de disfrutar las miniedades comunes de nuestra vida. Pero son estas pequeñeces las que nos hacen sentirnos vivos y libres.

La semana pasada al despertar, he de confesar que nuevamente sentí estas sensaciones deliciosas de sentirme vivo pues fueron unos días de reflexión y nostalgia. Así que estas líneas sólo son para expresar mi sentimiento de felicidad por estar en esta vida a la cual le estoy muy agradecido por las experiencias que estos meses me ha dado.

Disfruten su pasar por esta aventura de existencia y que ustedes vivan su vida y no que la vida les viva a ustedes.

Presentación entre amigos

Fue la presentación de un libro que contiene un recopilado de textos periodísticos, donde se incluyeron dos escritos míos desde la mismísima Facultad de Ciencias Políticas. A mí me tocó la consigna de asegurar la asistencia de tres de los cuatro presentadores.

El primero fue al que considero mi amigo y profesor del periodismo especializado, Gonzalo. Fue mi jefe durante mi paso por nuestro querido periódico universitario. Llegó puntual a la cita y en su turno al micrófono dio parte de su cátedra con consejos sabios de cómo ser mejores periodistas.

El invitado que más nos costó confirmar y asegurar fue nuestro respetado capitán de los Pumas. Joaquín Beltrán aceptó ser parte de la mesa de presentadores y la expectativa que creó en la facultad fue mayúscula. Teníamos miedo de que no llegara así que fuimos por él a su entrenamiento. Nos aseguró que sí llegaría y, tiempo después, lo estábamos guiando a nuestra querida facultad.

Pese al acecho de varios chicos que se dieron cita para pedirle una foto o autógrafo no pasó momentos de aprieto y disfrutó la plática con los alumnos. Nuestro capitán es a todo dar, esperemos que dentro de poco lo veamos dando grandes partidos por otro campeonato para los auriazules.

Mi último invitado fue una leyendo de la Universidad: Manuel Pajarito Andrade. Para quienes no saben quién es, se trata del creador del logotipo deportivo del Puma de la UNAM. Sí, ese que tienen los Pumas en grande en sus playeras de juego.

Con su sencillez acostumbrada, expresó públicamente su agradecimiento a mi persona por la entrevista realizada. Me conmovieron sus palabras pues es una persona que agradezco el darnos un logotipo por el cual luchar y honrar en los campos deportivos.

En conclusión fue un día fenomenal donde estuvieron reunidas celebridades a las que agradezco sus enseñanzas y palabras de aliento. Y para cerrar con broche de oro, asistieron todos mis seres queridos. Incluyendo a todo el equipo de Goya Deportivo. Gracias!!!!

El buen Pajarito

3 comentarios:

ALDERGUT dijo...

Fue una tragedia que nos deja muchas interrogantes y un gran vacío. Ahí, en esos momentos, el hubiera habría sido un enorme salvavidas... pero las cosas pasan por algo, y aunque la vida no parezca justa, en ocasiones nos deja enseñanzas para otras personas que estaban sumerjidas en la oscuridad y no veían cómo encontrar la luz... ese fue el legado de Kika y aunque se va a extrañar enormemente hay que agradecerle el hermoso regalo que nos hizo: darnos cuenta de que la vida es muy corta y vivirla, gozarla y disfrutarla con todos quienes nos rodean... Un abrazo amigo

Gade Herrera dijo...

Ahora entiendo por qué lupe estaba enojada contigo por no avisarle que iría Beltran a la Fac...

Que bueno por tus textos...



Un hasta pronto a ella...

Chitiva dijo...

Aldergut: A disfrutar al máximo la vida y mostrar que es un deleite este paso de efímera existencia. Un abrazo.


Gade: Sí caray, Lupe se enojó con toda razón. Mis mejores deceos para nuestra amiga y vaya que la extrañaremos en la redacción.