Aprendes, enseñas, aprendes, enseñas, aprendes y vueves a enseñar. Es el ciclo que se repite cada año en la Escuela de futbol en la que soy entrenador. Cada año, es el mismo proceso: curso, pretemporada, sorteo de equipo, temporada y despedida.
Es un ciclo donde uno tiene la oportunidad de enseñar hábitos a los niños, pero indudablemente uno acaba aprendiendo de la diversión que derraman los niños. Ayer inició mi primer partido con el poderosísimo equipo de las aves narisudas. Qué mejor inicio que el encontrame con tres exalumnos del equipo pasado. Es un alivo porque uno tiene la confianza y el repaldo de los papás que ya conocen tu trabajo.
Los otros niños parecen traer buena escuela. La diferencia en comparación de otras temporadas es que ahora tendré la responsabilidad de chicos veteranos, o más bien adolescentes pubertos, de 10 y 11 años de edad.
El reto es bueno, ya que es una edad en la que empezan a revelarce contra la autoridad. En mi caso empecé a revelarme contra ella cuando ya no permití que mis padre entraran conmigo al baño cuando no tenía ni dos años de nacido. Siempre acababa metido en la taza pero "yo cholito".
Fue un buen momento el dar mi charla de quién soy y cómo trabajo, y que varios padres y niños de mis anteriores equipos pasaban junto a mí para saludarme y desearme una buena temporada. Despues de cuatro equipos bajo mi dirección, empiezo a darme cuenta que este ciclo se está terminado. No me veo más que un año más, si acaso dos, como entrenador de niños pues mi profesión son los gajes del periodismo y es ahí donde quiero seguir aprendiendo para después volver a enseñar.
Por cierto me estrené con una derrota de 4-1, pero no me preocupa. Estoy acosumbrado a iniciar de atrás para adelante. Una enseñanza que me dejó el aprendizaje.
domingo, febrero 13, 2005
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2 comentarios:
Felicidades primo por este espacio en el que tenemos la oportunidad de leer tus anécdotas y demás peripecias que nos hacen sentirte mas cerca, 10 000 km es un poquitin lejos. Bueno, espero que sigas escribiendo mas y que pumas retomen el vuelo.
gracias primo!! Espero que mis chocoaventuras sean de tu agrado y que tú nos sigas escribiendo de las tuyas. Saludos y un goya por los pumas. Siempre inician perdiendo y jugando mal para terminar siendo campeón.
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